Esfera santa de mis noches,
lacerante condena
que regresas a evocar
mi tristeza,
mi amargura,
mi dolor,
mi pena.
Tempestad y espinas
descienden hasta mi albina piel
ahogando mi vida.
Cual mártir milagrosa,
expele tu fulgor
el último hálito de esperanza.
¡Tranquila vigilante de mis sombras!
Sólo duermo.
De mis sueños,
la sentencia
de tu presencia.
lacerante condena
que regresas a evocar
mi tristeza,
mi amargura,
mi dolor,
mi pena.
Tempestad y espinas
descienden hasta mi albina piel
ahogando mi vida.
Cual mártir milagrosa,
expele tu fulgor
el último hálito de esperanza.
¡Tranquila vigilante de mis sombras!
Sólo duermo.
De mis sueños,
la sentencia
de tu presencia.
4 comentarios:
Supongo que en tu poesía
estas hablando a la luna
y es cosa que me infortuna,
pues siempre fue amiga mía.
Si ella te pone triste
permíteme que le hablé,
pues sabe que más le vale
hacer lo que el Tano dice.
La diré que en adelante
se porte mejor contigo o se las verá conmigo
que por ti la lanzo el guante.
Puede que salga herida
o puede matarme a mí,
que si triste te veo a ti
nada me importa la vida.
(Para ti, MI TODO)
No sé que verás antes. Entra en Felicidad desde la poesía (Andreadelmar)
Mi Tano querido,
es un poema genial, (aunque no suene a adjetivo muy literario ni de altura).
Se agradece profunadmente el cariño y el tiempo para convencer a la luna de amigarse conmigo... .
Te abrazo, gracias!
¿Que puedo decir que ya no te haya dicho en TT mis adorada hermana del alma??
Eres mi felicidad de hoy. Mi motivo grandioso para darle gracias a la vida de poder compartir un espacio en esta tierra con quien adoro desde lo mas profundo de mi corazón.
Te quiero con toda el alma amiga!
Caro
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