17.7.14
La Promesa
No se confunda mi ruego
con letanías impostoras,
que del falso credo
profeso sólo el "aquí y ahora".
A lo largo de cien vidas,
excitaré al pecado.
No verán mis culpas
a éste cuerpo doblegado.
*
Justificará el deseo
nuestra ecuánime condena.
Prescindirán las almas
de la adherida pena.
Llegaremos al Juicio,
tal como nos hemos disfrutado,
deleitando las quimeras
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