11.1.13

El misterio de un Silencio




¿Por qué someter a la sensible estrategia de un silencio?
Lágrima que es mía, 
que sin mi nombre no existiría;
 sólo un respiro bajo el cielo.


Sabiendo que tu alma es mi viento,
callas egoísta el sentimiento que inspiro.
Llórame con razones justas,
no con utópicos finales,
conclusiones condescendientes,
afirmaciones de bocas desconocidas,
úlceras ajenas,
aprensiones prohibidas.


¿Hasta cuándo seré una sombra?
Si deslumbra la luz que nos alimenta.
Piénsame en hoy
y libérame de altares.
Tómame desnuda,
sin mantos ni ajuares.
Mi verdad sería tu pecho,
el estruendo,
el triunfo 
de tu rehén.


¿Por qué someter a la sensible estrategia de un silencio?
Lágrimas que son mías.