Se ha unificado el séquito.
Toda una vida ausentes y en conflicto;
han encontrado la calma bajo la sombra de sus párpados.
¡Quién diría que la pugna acabaría!
Ella marchaba al ritmo de foráneas filosofías.
El creía ya no marchar... .
¡Sí, había resistido el sentimiento!
"La esperanza es lo último que se pierde."
Y que razón tenían... .
Los demonios se tomaron de las manos.
Y los ángeles celebraron la ceremonia.
Creedme,
no es la muerte el final.
Cual legión de aturdidas ánimas,
hoy disfrutan y se aman
los invitados al festín.
Se ha unificado el séquito.
Pensamientos ebrios de luz.
4 comentarios:
Caro, momentos especiales si los hay, siempre habrá huellas que nos marcan, algunas que merecen olvido, otras, las mejores para disfrutar.
Un beso
Tan cierto lo que dices Amigo mío... . Lo mas importante tal vez es saber apreciar lo bueno de aquellos momentos que intentamos borrar para siempre.
Un gran abrazo querido Casper!
Armonizar la vida interior, muchas veces en pugna, nos hace libres.
Bella poesía, un placer regresar.
Un beso.
El placer es enteramente mío. Gracias a tí por dejar tus hermosas palabras en la que siempre ha sido tu casa.
Un gran abrazo y disculpa la demora en responder a tu comentario.
Todo mi cariño,
Caro
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