17.8.09

AUTORETRATO


Penumbra
que danza entre muros
de piedra y pobreza.
El instrumento se empapa
de aceites nobles.
La mano tiembla
ante un espejo esclavo,
a punto de ser
mutilado
por la sinceridad.

El pintor
exprime sus dones
ante la imágen envejecida.
Sus trazos,
los cordones,
que unen
la vida con el papel.

A quien retrata
la vista?

Al fiel pulso
obligado
por el artista
o a la vida
misma
encarnada
en un pincel?

El reflejo
del alma ha de verse.


El arte es arte
cuando se expresa
en la presencia
del silencio.

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