20.6.20

De Fortuna y Traiciones


(2015 o 2016)

Tan pronto como llegó,
la liberé de sus cadenas, 
sobrevivía sin prejuicios
dentro del fuego de mis venas.

Supo adaptarse a mi intimidad;
cada deseo, su decreto,
y del silencio de sus versos
construímos un secreto.

El pacto iba a mallores,
mutuo voto de confianza,
ésta Fortuna maldita,
resultó ser la venganza....

del tiempo,
de un sueño,
de mi corazón.


19.6.20

Cuando vuelves


(2013)

Vuelvo a sentirte.
Eres el casto espacio
que odia mi oscuridad.

Hablas en pasado, 
arrasando con mis noches infinitas.
Sin embargo, vuelves y reivindicas
mi cuerpo..., mi fidelidad.

Vuelvo a suplicarte:
¡Desciende a la profundidad de mi sangre!
Pero jamás llegas a escucharme...,
y te vuelves a marchar.

9.6.20

De Silencios y Despedidas




Sé que están allí. 

Hoy,
mis palabras 
no hallan la salida.

Se han perdido 
en la aflicción 
de mis cuerdas vocales. 

Poco les queda 
para sucumbir 
ante el eterno silencio 

o morir.

6.6.20

Sin título - 18520



Cuando mis pies ocupan
el espacio sagrado de un segundo ajeno, 
me pregunto por las manos
de aquel ser extraño, extranjero.

Restos de memorias fugaces
juegan a confundir a mi viento
y entre caricia y caricia, 
ésta, que era mis historia, 
se transforma en lo nuestro.

20.6.16

Al blanco


Halan de mis pies al núcleo,
como luz que rapta desde el oscuro silencio.
Es uno, son dos, son cientos,
los fugaces pensamientos que condenan mi paz.

Flechas que atinan sin fallo
contra un juicio malherido.

"Bendición",
(musita el agónico zumbido),
volviendo a acertar.



18.6.16

Demasiado tarde


Lamento la caótica disposición
de mis prioridades aquella noche.
El llamado de la sangre fue impetuoso
y ante él, se sometió la palabra.
Pudo más el inexcusable anhelo
de provocar la ilusión de un horizonte
cuando la noche aún seducía a la luna.
Y así, 
segura de que tus besos
disipaban el tiempo,
perdí la oportunidad de decirte:
Adiós...

19.12.15

Falsa Paz




Ésto de obligarse a olvidar,
como un querer suprimir lo dicho,
no se acerca a la quietud.

Es un diálogo a solas;
ver perderse a la mirada
y conservar la vista.

Mis labios, suspendidos,
mecen y consuelan
la culpa que se niega a morir.

Ni tú un recuerdo,
ni yo la sensatez
que predica la biblia de mi honor.

¿Para qué engañarnos?
Tanta mentira sólo puede admitir
una sola verdad.

Pasarás con el tiempo,
aquel que siempre regresa
a recordar lo que no se olvida.